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90 g de manteca blanda
220 g de azúcar
2 huevos
1 yema
1 cucharada de miel
1 cucharadita de esencia de almendras
380 g de harina leudante
1/2 cucharadita de polvo para hornear
100 g de almendras picadas
20 g de cacao amargo
huevo para pintar
Mezclar la manteca blanda con el azúcar.
Agregar los huevos, la yema, la miel y la esencia de almendras.
Dividir la masa en dos porciones iguales.
Agregar a una de ellas 200 g de la harina, previamente tamizada con el polvo para hornear, y la mitad de las almendras
y, a la otra, el resto de la harina tamizada con el cacao y el resto de las almendras.
Envolver las masas en papel film y llevar a la heladera hasta que estén frías y firmes.
Precalentar el horno a temperatura media a baja (170ªC).
Estirar las masas, formando dos cilíndros, y unirlas.
Colocar sobre una placa para horno, enmantecada y enharinada, presionando la superficie.
Pincelar con el huevo batido y hornear durante aproximadamente 25 minutos.
Retirar, dejar enfriar y cortar en tajadas de 1 cm.
Bajar la temperatura del horno a mínimo y dejar secar allí los biscottis de ambos lados
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